¿Se preocupa por las costumbres de comer de los niños?
Cuando entran a la escuela, los niños afrontan nuevas experiencias y desafíos. Uno de estas experiencias nuevas es la hora del almuerzo, y algunas veces incluso, desayunar en la escuela. Toman más de sus propias decisiones al escoger comidas y en decidir porciones.
Este tiempo es bueno para enseñarles de que constituye una dieta saludable y por qué el comer una variedad de comidas es importante para la buena salud. Aquí le dejamos algunos consejos que pueden ser muy útiles para esta etapa:
- Anime a sus hijos a desayunar cada día, esté en la escuela o en casa. Sin el desayuno, muchos niños tienen hambre a media mañana. Esto puede afectar su concentración. Incluso la falta a corto plazo del alimento puede afectar la función del cerebro.
- Enséñelos a elegir y beber leche descremada o baja en grasa. El calcio construye los huesos y dientes fuertes, y la vitamina D agregada a la leche facilita la absorción del calcio en el cuerpo. Huesos fuertes y duros pueden prevenir la osteoporosis a una edad avanzada.
- Acostúmbrelos a comer frutas y verduras diariamente. Cinco o más porciones son recomendadas para todas las edades. Las frutas y los vegetales contienen vitaminas y minerales. Aunque un suplemento de vitamina puede suplir muchos nutrientes, los científicos piensan que hay otros sustancias químicas que sólo aportan las frutas y verduras naturales las cuales son importantes para mantener una buena salud, como los pigmentos que les dan color, los cuales se conocen como “phytochemicals” (sustancias fitoquímicas) e investigaciones científicas indican que tienen un rol en bajar el riesgo del cáncer y de las enfermedades del corazón a una edad avanzada.
- Cuidar que coman alimentos del grupo de carne y de proteína diariamente. La proteína es importante para desarrollar los músculos y son las mejores fuentes de hierro. La escuela es un tiempo muy ocupado para los niños, y los alimentos altos en hierro ayudarán a asegurar que tengan la energía suficiente para trabajar y jugar.
- Limite los “extras” que usted permite que sus hijos compra a la escuela, como papas y golosinas o bebidas gaseosas. Esto no forman parte del programa escolar del almuerzo y proporcionan muchas calorías con pocos nutrientes.
Así que le recomendamos que antes de que los chicos opten por comprar comida chatarra en la tiendita del colegio, mejor vaya de compras con ellos para escoger bocadillos nutritivos. Una lonchera de material aislante es una buena compra porque su hijo(a) puede llevar más variedad de alimentos a la escuela (como alimentos perecederos que no deben estar a la temperatura ambiente por más de dos horas). Envases pequeños de yogurt, zanahorias y aderezo, ensalada de frutas y galletas saladas son buenas opciones de bocadillos.
- Muchas veces los niños llegan a casa y están listos para comer lo que es conveniente. Dulces, galletas, etc… los cuales, al ser no perecederos, están listos para comer en la despensa. Aunque estos alimentos pueden ser incluídos moderadamente en una dieta, consumirlos cerca de la hora de comer puede disminuir el apetito de su niño para los alimentos nutritivos que usted sirve. Limite la cantidad de estos bocadillos que guarda en la cocina. En su lugar, tenga más opciones de bocadillos rápidos y nutritivos disponibles, como el queso, el yoghurt bajo en grasa, o frutas y verduras preparadas.
La escuela primaria es un tiempo en que los niños empiezan a tomar más de sus propias decisiones sobre la comida. Si usted les ayuda a empezar bien con la nutrición, puede influir en su salud a largo plazo.