Trabajar arduamente durante largas jornadas al día, vivir en competencia directa con tus compañeros de trabajo y no descansar porque siempre hay trabajo pendiente pueden ser los indicios de convertirte en un workaholic o adicto al trabajo. ¿Eres un Workaholic? Descúbrelo aquí.
Hay características básicas que describen a un Workaholic, quizás seas uno de ellos y aún no te has dado cuenta o no has querido darte cuenta…
- Hay una necesidad compulsiva por realizar las actividades laborales, incluso interfiriendo con eventos sociales previamente organizados; se vuelven comunes las cancelaciones para actividades familiares y ni hablar de la convivencia con los amigos porque está prácticamente extinta.
- La jornada de trabajo rebasa las 12 horas al día (incluidos los fines de semana), entre más tiempo se pase en el trabajo ¡mejor!. Muchas veces se recurre a los analgésicos, café o estimulantes con el objetivo de ayudar a revitalizar el cuerpo para poder rendir en todas las actividades.
- El incremento salarial es un gran estímulo; sin embargo, el reconocimiento público y exaltación de los logros ante los demás compañeros de trabajo, es uno de los objetivos. Se vuelven adictos a la comparación y a ser ganadores en todos los proyectos y actividades.
- Se afecta la capacidad de colaboración y el compañerismo. No aceptan delegar actividades ya que es sinónimo de debilidad.
Repercusiones en la salud:
- Se disparan los niveles de ansiedad y estrés, hay un desgaste físico y emocional, además se tienen afectaciones en vías respiratorias, dermatológicas o vasculares.
- Se desencadenan estados de ánimo adversos como, depresión, dolores de cabeza, musculares, cansancio, fática crónica, irritabilidad, mal humor, gastritis e hipertensión arterial, entre otras.
Aspectos sociales afectados:
Familia. Se deteriora la interacción familiar, ya que la convivencia se ve anulada. No hay comunicación. ¿Platicas con tus padres, hijos, hermanos, esposo(a)?
Amigos. Hay una ruptura con el circulo social, se vuelve predominante la relación laboral, y ya no se deja tiempo para actividades de diversión o esparcimiento; las cuales son de suma importancia, es parte del equilibro de un buen desarrollo del ser humano. ¿A cuantas reuniones has ido en el último mes?
Pareja. Se alejan del conyugue por la preferencia de las actividades laborales, evidentemente se generan fricciones en la pareja que pueden desencadenar en consecuencias serias.
Siempre hay que tener presente la frase “Trabajo para vivir y no vivir para trabajar”, recordemos que cualquier adicción es negativa, habla de una inequidad y mayor preponderación hacia un extremo, el cual no será positivo para el crecimiento y desarrollo del ser humano.
El reconocimiento laboral, es una ambición que todos podemos sentir, la diferencia está en lo que estamos dispuestos a hacer o sacrificar con tal de obtenerlo.
¡Cuida tu salud!
Imagen 1 extraída de tuvozentuvida usada únicamente con fines ilustrativos
